Nació un 18 de mayo de 1927, en Lafinur (San Luis) y en 1946 con casi veinte años ella y su hermana iniciaron la carrera docente como maestras de frontera en la lejana y desolada Pampa Landriel (Chaco), por aquellos tiempos habitada por grupos pequeños de naturales de la tierra que necesitaban más que aprender las primeras letras, nada las detuvo y ese gran amor mezclado con una plena vocación las mantuvo por dos largos años, haciendo patria como ninguna otra mujer en esos tiempos.
Cumplida la patriada, se afincó en Carpinteria de San Luis y en la Escuelita 21 conoció a Néstor Arias, con quien contrajo matrimonio, también un maestro de la misma escuela y con el correr de los años Intendente de la Localidad, sus hijos Diana y Luis los recuerdan con admiración y respeto.
Siguiendo su breve biografía , Zulma finalizó su carrera docente como Directora de la Escuelita de Los Molles, a tres km de Carpintería, en sus conversaciones jamás olvidó a sus colegas, a los niños y a su tarea en el aula, con muchos años en su haber su memoria lúcida le permitía recitar poesías, contar anécdotas, cantar Aurora y reír alegremente recordando las miles de demostraciones de cariño que recibió tantos años. Era realmente un libro abierto que nunca parecía iba a cerrarse. Pero, los años trajeron para Zulmita algo inesperado y fatal, el mal de Parkinson!! y su memoria la empezó a dejar, su rostro se entristecía cuando no podía recordar un verso, de los tantos que endulzaron su vida.
Desde un sillón en la galería de su casa junto a su segundo esposo, vio pasar los días, levantando la mano a quien la saludaba, sin poder recordar quien era, el tiempo y su enfermedad llevó su mente fértil, pero no su calidez. Un ser humano increíble, una humildad a flor de piel, una docente de alma que a casi dos años de su muerte está presente en los que la admiraron y amaron.
Un ser que honró a su Patria y que es justo recordarla en este mes de Mayo.
Cumplida la patriada, se afincó en Carpinteria de San Luis y en la Escuelita 21 conoció a Néstor Arias, con quien contrajo matrimonio, también un maestro de la misma escuela y con el correr de los años Intendente de la Localidad, sus hijos Diana y Luis los recuerdan con admiración y respeto.
Siguiendo su breve biografía , Zulma finalizó su carrera docente como Directora de la Escuelita de Los Molles, a tres km de Carpintería, en sus conversaciones jamás olvidó a sus colegas, a los niños y a su tarea en el aula, con muchos años en su haber su memoria lúcida le permitía recitar poesías, contar anécdotas, cantar Aurora y reír alegremente recordando las miles de demostraciones de cariño que recibió tantos años. Era realmente un libro abierto que nunca parecía iba a cerrarse. Pero, los años trajeron para Zulmita algo inesperado y fatal, el mal de Parkinson!! y su memoria la empezó a dejar, su rostro se entristecía cuando no podía recordar un verso, de los tantos que endulzaron su vida.
Desde un sillón en la galería de su casa junto a su segundo esposo, vio pasar los días, levantando la mano a quien la saludaba, sin poder recordar quien era, el tiempo y su enfermedad llevó su mente fértil, pero no su calidez. Un ser humano increíble, una humildad a flor de piel, una docente de alma que a casi dos años de su muerte está presente en los que la admiraron y amaron.
Un ser que honró a su Patria y que es justo recordarla en este mes de Mayo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario