Solo la revisión veraz de los hechos de la historia, hacen de ella un instrumento para evaluar y emitir conceptos que puedan aclarar a la comunidad. Lo que se debe buscar feacientemente es: cuando se dice la verdad y cuando se utiliza partes de esa verdad para tergiversarla en beneficio de algo o alguien. Como siempre hice, a través de mi larga vida como profesora de historia, tomo la libertad como elemento importante para aconsejar a quien quiera realmente conocer la verdad de los hechos. Realizar un trabajo a conciencia por medio de una lectura de documentos veraces, con el objeto de poder llegar a lo que buscamos. Luego tratar de escuchar la mayor cantidad de opiniones para poder indagar con propiedad lo que realmente interesa y ampliar lo que se a dilucidado.
No podemos aceptar algo como válido, si antes no hemos evaluado. En especial no solo a quien se dice, sino porque lo dice y, en que se basa esa afirmación. No apuremos nuestro apoyo o nuestra negación de los hechos: podemos lesionar libertades. En estos días se oyen opiniones de periodistas que con ligereza emiten opiniones, principalmente aquellos que por su trayectoria y su cultura debieran tener mayores responsabilidades. Ellos tendrían que hacer llegar a sus oyentes una opinión comprometida con la verdad, sin politicas partidarias, porque nosotros y ellos nos está vedado tomar banderas, somos orientadores de la búsqueda de la verdad, más si millones nos escuchan o nos leen. Deben apoyar la libertad de expresión, en todas sus formas y principalmente no ser participes de quienes pretenden acallarlas.
Si quieren leer una parte de la verdad sobre Papel Prensa invito a que leer Wikipedia (enciclopedia libre) y principalmente buscar sus fuentes. Además escuchar todos los comentarios que hacen del tema y sacar conclusiones. Como ciudadano tenemos un deber ineludible: estar comprometidos con la realidad de nuestro país, pues sino es así , no podremos decir que pertenecemos a su historia.
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